Estas patatas al horno crujientes no tienen nada que envidiar a las fritas, palabrita. Han quedado extra crunchy, sabrosas y encima son súper saludables.
¿Por qué? Pues porque están hechas al horno (también se pueden hacer en la airfryer), y solo llevan pelín de aceite de oliva virgen, sal y especias. Son un acompañamiento ideal para cualquier cosa, incluso solas con alguna salsita son espectaculares. Y si las usáis para hacer huevos rotos ya alucináis.
Las especias les dan el toque, y la ventaja es que se pueden usar las que le gusten más a cada uno, no hay una combinación fija porque todas funcionan a la perfección.
Así que os invito a probarlas y a que os convenzáis de una vez por todas de que no es necesario freír para obtener resultados crujientes o rebozados espectaculares como el de mi pollo crujiente (podéis ver la receta clicando aquí).
Ah, y con boniato también quedan brutales, así que tendréis que probar las dos versiones para comparar…
¿El truco? Que al cortarlas los bastoncitos sean bastante finos, así quedan hechas por dentro y súper crujientes por fuera.
¡Probadlas y me contáis!
INGREDIENTES
- 2 patatas
- AOVE
- Especias al gusto: pimentón, orégano, ajo en polvo, comino…
- Sal
PREPARACIÓN
- Precalentamos el horno a 220º.
- Cortamos las patatas en bastoncitos finos, ponerlas en un bol y añadir el resto de ingredientes.
- Mezclar bien para que se impregnen con todas las especias.
- Poner en una bandeja de horno con papel vegetal y hornear durante 10 minutos. Removerlas y hornear durante 10-15 minutos más, hasta que estén crujientes.
- Servir nuestras patatas al horno crujientes como acompañamiento de lo que más nos guste.
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