Estos pastelitos de remolacha y cacao tan cuquis son una versión de la tarta de remolacha que tengo en mi perfil de Instagram pero utilizando cacao intenso y haciendo pastelitos individuales.
Como siempre son sin azúcar, en este caso están endulzados con dátiles, y están hechos con harina integral, así que son supersaludables y están pero que muy ricos.
El color que queda es precioso, y ahora que llega San Valentín pueden ser un postre ideal para las celebraciones románticas (y para las no románticas también, hombre).
Si lo preferís podéis hacer una tarta utilizando un molde más grande, pero tendréis que tener en cuenta que necesitará más tiempo de horno (aproximadamente el doble).
INGREDIENTES
- 150 g de remolacha cocida
- 2 huevos
- 150 g de harina de trigo integral
- 2 Cdas de cacao negro intenso en polvo
- 125 ml de leche o bebida vegetal
- 6 dátiles Medjool (o más si lo queréis más dulce)
- 1/2 cdta de levadura en polvo
- 1/2 cdta de bicarbonato
- Zumo de medio limón
- Pizca de sal
Para el frosting:
- Un poquito de jugo de remolacha
- 150 g de mascarpone
PREPARACIÓN
- Precalentamos el horno a 180º con calor arriba y abajo.
- Metemos en la picadora la remolacha a trozos, los huevos, los dátiles sin hueso, el cacao en polvo, el zumo de limón y la sal y trituramos bien.
- Mezclamos con la harina hasta que se integre por completo.
- Disolvemos la levadura y el bicarbonato en la leche y la añadimos a la mezcla, mezclando bien.
- Dividimos la masa en 4 moldes individuales engrasados con aceite o mantequilla (o en uno más grande) y metemos en el horno.
- Con los moldes individuales bastará con cocinar durante unos 20 minutos; hacemos la prueba del palillo para comprobar que estén hechos por dentro.
- Cuando estén cocinados, sacamos del horno y dejamos enfriar.
- Mezclamos el mascarpone con el jugo de remolacha hasta que tenga el tono rosa que nos guste. Podemos añadir edulcorante al gusto o esencia de vainilla si lo deseamos.
- Una vez fríos, desmoldamos los pastelitos y los abrimos por la mitad para rellenarlos con el frosting.
- Cubrimos también la parte superior y esparcimos bien para que quede homogéneo.
- Dejamos enfriar en la nevera para que se endurezca ligeramente y servimos nuestros pastelitos de remolacha y cacao.
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